Así que tal vez no me salga minimamente no depresivo el post y este termine como el anterior y luego termine intentando cortarme las venas en un alcoholico estado. Como hace dos años.
Hace dos años o tres, ya no recuerdo. Yo era la niña más desgraciada del universo. Era depresiva y gorda. Todavía recuerdo cuando un tipo vió una foto mia de ese entonces y lo que dijo, Dios lo que dijo, quedará marcado en mi memoria por el siempre de los siempres y ni con ajax se quitará lo quemado de mi memoria como con ajax se quita lo quemado de las cacerolas cuando nado entre nubes y olvidome de mis verduritas al vapor y se quedan pegadas en el fondo. En esos casos las tengo que tirar por que a veces saben mucho a quemado y a veces quedan demasiado aguadas. Me da mucho coraje cuando mis vainas de chicharitos o como sea que se llamen se queman y me quedo sin ellas. La señora del puestito nunca me ha dicho como se llaman. Por lo general, nomás le digo, ¿a cuánto Doñita? Pues a esto. Le doy dinero y me voy con mi mercancia. Y así nos ignoramos y el país sigue en su espiral de corrupcion sexo y rocanroll. Decia que nunca olvidaré lo que dijo: Y ahí esta Sara, comiendo una paleta, contenta y ligeramente gorda. Si, comia una paleta. Si, estaba ligeramente gorda. Pero no era feliz. Por que estaba gorda. Y por que me moría por un tipo que, ash. Entonces nace la jocosa historia de cuando queria cortarme las venas en estado etilico armada con una escuadra. Jajaja.
Dios, ya no tengo de que hablar. ¿Qué hago? El post esta muy cortito.
Ya me estoy cansando. He comido demasiado estos días. Me aterra. Ayer comí más jamon navideño del que alguna vez pensé comer. Como es cerdo, siempre le hago el feo. Más ya lo probe, delicioso esta. Y comí mucho. Ahora, solo comeré arroz.
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